Me quede mirando fijamente al cristal, cuando alguien abrió la puerta:
-¿Todavía estas así? –dijo Kate con las dos manos en la cintura.
-Este… lo siento, de verdad, pero estaba sumergida en mi mundo y ¿sabes lo que he pensado? –dije tapando el espejo con disimulo.
-No… ¿el qué? –dijo con cara dubitativa.
-Pues que aunque me cueste superarlo, aunque me duela, aunque no me haga a la idea, quiero rehacer mi vida, aunque ya Dylan ya no esté a mi lado…-dije tragando saliva-Todavía no me iré con otro chico pero quiero tener otra actitud, si el destino ha querido esto para mi será lo mejor y tengo que afrontarlo, será lo mejor… -dije abrazándome con las toallas puesta aún.
-Chrys… -dijo acercándose a mi- Sabes que puedes contar conmigo para superarlo, estate tranquila, todo se va a arreglar, todo volverá a la normalidad… -dijo abrazándome.
-Gracias Kate, de verdad, no sabría superar esto si tu no estuvieses a mi lado… No sé cómo agradecerte que estés aquí conmigo, haciéndome esta sopa –dije con una pequeña sonrisilla en la boca- y este trato tan gentil que has hecho al venir aquí, de verdad, gracias, eres lo mejor que tengo en este momento y no quiero desperdiciarlo –dije con mi cara en el pecho de Kate.
-Bueno Chrys, que ya está la sopa en la mesa, anda, vístete ya… -dijo dándome una palmada en el trasero.
-Sí, ya me visto. No tardo –dije dirigiéndome a mi habitación.
Me puse mi pijama y mi bata limpias y me asome a la ventana, la noche era fría y estaba empezando a caer algunos copos de nieve. La cuidad se veía moteada de blancos y translucidos copos de nieve, se veía acogedor con la llegada de la navidad pero algo me decía que esta navidad no iba a pasar desapercibida en mi vida.
Cerré la ventana y toqué el cristal frío con la palma de mi mano y para mi sorpresa me sumergí en mí ser, cerré los ojos y tragué saliva. Todo me daba vueltas y estaba todo en negro, tenía un sentimiento extraño, como si alguien estuviera en este mismo instante en mí ser, me sentía llena, completa. Entonces divisé una luz tenue y azulada, quise abrir los ojos, pero estaban como sellados como si mi otra parte de mi ser no quisiese abrirlos y de repente escuché una voz que me decía “Búscame, encuéntrame, no te rindas, tu eres parte de mí…” y entonces me caí de bruces al suelo.
3 comentarios:
La verdad, me encantó! no sé por qué a lo largo de la novela he creído que la chica es ezquisofrénica y que el chico en realidad está muerto. Podrías aclararme la duda? elchicodela16b.blogspot.com y me encantó el diseño del blog! es uno de los pocos que me ha gustado ya que no tiene cosas sangrientas y está sencillo, hasta se parece al mío jajaja saludos!
Aw, me viene gustando muchísimo esta historia :3 unas ternuritas las dos x3. Y sigue sin gustarme el trato que tiene este muchachito con Chrys xD.
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